Me gustaría apagar los
relojes en una vela, quemar distancias en un varilla de incienso, paralizar
momentos al pulsar el interruptor de la luz, hacer fotografías con los ojos y
revelarlas en mi alma, enamorar paisajes y cederlos en un beso compartido, componer
canciones y dar conciertos en la piel, cazar sueños y liberarlos con el tacto
de dos manos, secuestrar sensaciones y rescatarlas donde se dejen, sobornar al
miedo a base de fantasías y hacer de mis deseos el hoy.