jueves, mayo 17, 2007

En ti, solo en ti...

En la cama. Echado sobre el bulto que hacen las sábanas desatendidas. Canciones de La Guzmán acompañándome mientras los demás duermen. Un intento por no estar solo otra noche más.

Oliendo tu aroma desde algún lado. Cerrando las ventanas para que no escape. Escribiendo tu nombre junto al mío. Ocultando las emociones tristes. Sonriendo. Secando cada una de las lágrimas en mis mejillas.

Sin oír nada. Sólo respirando. Hojas escritas en mi mano., las leo, Las vuelvo a leer. Las pongo a un lado de la cama. Me arrojo al suelo. Tu aroma sigue vivo. ¿Estás aquí? Me levanto, camino, te busco, ¿Te encontraré?. Sigo a mi olfato. Mis ojos ya no ven. Mis oídos ya no sirven. Mis manos ya no sienten. Mi boca... está con el último beso que nos dimos. Mi mente huyendo de mi locura. Me ha dejado aquí. ¿Contigo o sin ti? Pero yo... pensando en ti. En ti. Solo en ti.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me imaginaré destino de tus letras; haré mía la ilusión de sentirme causa y fin de este pensamiento.

Y siento plenitud, y la palabra más adecuada tal vez sea correspondencia. Correspondencia por que soy yo quien -sin decírtelo- te atraigo cada vez a mi mente.

Y trato de tener mis sentidos siempre despiertos; para verte y leérte en cada oportunidad, para agradar mi oido con tu voz y tu risa, para tocarte, para sentirte, y si la fortuna está de mi lado, para besarte.

Te preguntas si conmigo o sin mi, y la respuesta no acude a mi mente, tal vez está en ti saberlo; solo sé que tú sí estás en mi, y no siempre como quisiera, pero siempre suficiente. Suficiente porque alguna vez me regalaste tu voz, tu risa, tus besos, y juro nunca dejar de hacerlos mios.